
Imagen: Pablo Martinez
Los medios alemanes informan que los piratas informáticos sospechosos de tener vínculos con el gobierno vietnamita han violado las redes de dos fabricantes de automóviles, a saber, BMW y Hyundai.
El informe, procedente de Bayerischer Rundfunk (BR) y Taggesschau (TS), afirma que los piratas informáticos violaron la purple de una sucursal de BMW en algún momento de esta primavera.
Los atacantes supuestamente instalaron un package de herramientas de prueba de penetración llamado Cobalt Strike en hosts infectados, que utilizaron como puerta trasera en la pink comprometida.
BMW supuestamente había permitido que los piratas informáticos persistieran en su crimson, y siguió todos sus movimientos, cortando su acceso durante el último fin de semana, fines de noviembre.
Los reporteros de BR y TS afirman que los piratas informáticos detrás del ataque también violaron a Hyundai, pero no proporcionaron ningún detalle adicional sobre esta segunda intrusión.
Ni BMW ni Hyundai quisieron comentar sobre el artículo de la BR. Solicitudes similares de comentarios enviadas por ZDNet quedaron sin respuesta.
Intrusiones atribuidas a APT32
BR y TS dijeron que el grupo detrás de las intrusiones de BMW y Hyundai es un actor de amenazas conocido por sus ataques a la industria automotriz1, 2)
Conocido como Océano loto (o APT32), se cree que el grupo lleva a cabo ataques en nombre del gobierno vietnamita.
Según los informes, el grupo ha estado activo desde 2014. Si bien los ataques iniciales se habían centrado en piratear corporaciones extranjeras activas en Vietnam y otros países del sudeste asiático, desde 2017, el grupo se ha dirigido incesantemente a la industria automotriz.
Antes de las revelaciones de hoy, el grupo ha sido vinculado públicamente a un ataque contra Toyota Australia. Semanas después, Toyota Japón y Toyota Vietnam reveló infracciones similares.
Muchos expertos han especulado que el gobierno vietnamita ha sacado una página del libro de China y está utilizando grupos de pirateo para llevar a cabo el espionaje económico a compañías extranjeras, robando propiedad intelectual y luego usándola para sus corporaciones financiadas por el estado.
China utilizó esta estrategia para apuntalar su sector de fabricación de aviones, y ahora los expertos creen que Vietnam está haciendo lo mismo para su incipiente startup automotriz. VinFast, que comenzó desplegando sus primeros autos fuera de fábrica este año.